Snuppy, el primer perro clonado, nació en Corea del Sur el 24 de abril de 2005
Su nombre proviene de la combinación de las iniciales de la Universidad Nacional de Seúl (SNU) y la palabra inglesa “puppy” (cachorro). La clonación fue realizada por un equipo de más de 40 científicos de dicha universidad, liderado por el veterinario e investigador Hwang Woo-suk. El proceso se llevó a cabo a partir de células adultas del tejido de la oreja de un perro de caza afgano, empleando el método de transferencia de núcleo. Aunque ya había sido probada la efectividad de la técnica en diversos mamíferos (incluso, fue el utilizado para clonar a la oveja Dolly), esta era la primera vez que funcionaba en perros. En el experimento, 123 hembras recibieron un total de 1095 embriones. Se lograron solo tres embarazos, de los cuales dos llegaron a término. Snuppy fue dado a luz por un labrador retriever por medio de cesárea y pesó 530 gramos al nacer, la otra cría falleció a las pocas semanas de vida a causa de una neumonía.